jueves, 29 de mayo de 2014

Los primeros textos sobre América.





Los primeros cien años que siguieron a la llegada de Cristóbal Colon  a las Antillas fueron intensamente productivos en materia bibliográfica. Los textos sobre el nuevo continente tuvieron una característica común: se proponían testimoniar el encuentro con el nuevo mundo, difundir imágenes de las Indias para los lectores europeos, dejar constancia de los acontecimientos ocurridos, describir territorios observados por primera vez, dar cuenta a los reyes de sus posesiones, o difundir la fe cristiana.
Los diarios de navegación y las cartas forman un primer grupo de textos que fueron concebidos por hombres de acción, como Cristóbal Colon o Hernán Cortes. Estos escritos tenían siempre un mismo destinatario: los reyes de España, que exigían estar informados sobre la empresa que patrocinaban.
La Corona, además, solicitaba la escritura de relaciones, que eran informes que no habían trascribir la observación libre de su autor, sino datos precisos: “Habéis de informarnos del grandor de las dichas islas y de la gente que en ella hay y de la calidad que son para que de todo nos traigas entera relación” (Carta de los Reyes Católicos a Cristóbal Colon en su cuarto viaje).
También, las Crónicas e Historias sobre el Nuevo Mundo se escribieron con la intención de presentar un texto histórico que narrara los acontecimientos y las peripecias de la conquista.
Científicos han encontrado que las poblaciones de indígenas americanos que van desde Canadá hasta el extremo sur de Chile, se han erigido procedentes de al menos tres migraciones, y la mayoría descienden enteramente de un solo grupo de primeros emigrantes centroamericanos que cruzaron a través de Beringia, un puente terrestre entre Asia y América que existió durante las eras de hielo, más de 15.000 años atrás.
Mediante el estudio de las variaciones en las secuencias de ADN de nativos americanos, el equipo internacional descubrió que, si bien la mayoría de las poblaciones nativas americanas surgió de la primera migración, dos migraciones posteriores también hicieron importantes contribuciones genéticas.



Crónicas de India:
Bibliografía: Los crónicas que llegaron son los conquistadores los primeros en describir estos territorios hasta entonces desconocidos y que, por lo mismo, asumían ante sus ojos asombrados un carácter casi fantástico. El idioma en el que lo hacían era ajeno  al que se hablaba en tierras americanas: Español, portugués e, incluso, alemán. Fue precisamente un alemán, Ulrico Schmidl , un mercenario enrolado en la flota comandada por don Pedro de Mendoza en 1534 , el primero que se dedico a describir estas tierras del Nuevo Mundo.
Libro: Literatura 3 (Puerto de Palo).
Internet: Crónicas de Indias es un nombre genérico dado a compilaciones de narraciones históricas, principalmente desde la perspectiva de los colonizadores españoles, acerca de los acontecimientos durante el descubrimiento, conquista y colonización del continente americano. Aunque también se incluyen escritos de mestizos o indígenas americanos, realizados durante el siglo XVI.
Después del descubrimiento de América por los europeos, se conocieron los relatos de los llamados "cronistas de Indias", que informaban sobre la geografía y el modo de vida de los indígenas americanos y de las colonias, desde las relaciones del mismo Cristóbal Colón, su hijo Hernando, la famosa carta de Américo Vespucio y muchos otros descubridores y conquistadores como Hernán Cortés.
Enlaces externos:
·         Crónicas de Indias
·         Historiografía de España









    


La visión de los conquistadores:
Internet: La visión de los conquistadores, era obtener el máximo de riquezas y evangelizar. 
La conquista del Nuevo Mundo fue impulsada por instituciones como los Estados monárquicos, la Iglesia Católica y las grandes compañías comerciales.  Pero la importancia de estas instituciones no debe hacernos olvidar que los protagonistas de este proceso histórico fueron los conquistadores, hombres reales, de carne y hueso.
Los conquistadores eran hombres con poca o ninguna fortuna en tierras o en dinero, aunque algunos de ellos eran de origen noble.  Llegaron a América esperando lograr en el Nuevo Mundo los objetivos que en Europa les resultaban inaccesibles.  Estos objetivos eran la riqueza, el prestigio social y su contribución a la misión cristiana de evangelizar a los indígenas americanos. Sobre todo en los primeros años de la conquista, los conquistadores imaginaban que iban a alcanzar sus utopías sin conflicto.  Esperaban que las riquezas fueran la base de una posición de reconocimiento social en tierras americanas; y que, al regresar a España, la fortuna y el prestigio social recién adquiridos estuvieran legitimados por su servicio prestado a la expansión del cristianismo.  Sin embargo, en la práctica, la mayoría de los conquistadores no realizó sus utopías.
Bibliográfica: Los conquistadores fueron redactados por los misioneros a partir de testimonios orales de los indígenas o por descendiste de los indios y describen el asombro, el dolor y el sufrimiento de las victimas sometidas por hombres extraños y violentos.
La mayoría de los textos escritos por los conquistadores y misioneros no pueden incluirse dentro de la literatura. Sin embargo paralelamente a esa producción, surgió una épica sobre América.  



El origen de la identidad americana:
 Bibliográfica: La identidad del Nuevo Mundo se conforma de a poco en la medida en que esta región de la tierra se acerca o se aleja de la identidad europea.
En los relatos de viajeros del siglo XlX, comienza a notarse con mayor nitidez que América ha definido su identidad.
 Son muchos los que dicen que la “inmigración” es el pilar de la identidad americana-estadounidense. Lo cierto es que América en realidad fue una sociedad fundada por colonos, en su grandísima mayoría, británicos-ingleses. Sus valores, sus instituciones, y su cultura fue lo que aportó la fundación para el desarrollo posterior de lo que hoy es Estados Unidos. Inicialmente, todos los colonos aportaban una definición racial, étnica y sobre todo, religiosa, de los Estados Unidos fundados. Raza, origen, cultura y religión — estos fueron los 4 elementos que siempre se utilizaron para definir a los EEUU hasta bien entrado el siglo XIX. A finales del siglo XIX, la base étnica se amplió un poco para incluir a los alemanes, irlandeses, y escandinavos — al final, todos del noroeste de Europa. Llegada la II Guerra Mundial, la mayoría de los hijos de los italianos y europeos del este (polacos, etc) ya se habían también asimilado a los EE.UU y desaparece por completo el concepto de “étnia” para definir la palabra “Estadounidense” — americano. Posteriormente, tras el éxito que tuvo la campaña de los Derechos civiles para negros y tras la nueva legislación pro-inmigración que se firma en 1965, también desaparece “raza” para definir nacionalidad en los EE.UU (a pesar de que aún hoy la palabra “raza” se sigue utilizando en el censo de los EE.UU y en las solicitudes de empleo).



                 Capitulo 1













Capitulo 2
           













Capitulo 3            

















Autoras: Antonella Ginestar,Orellana Florencia , Gimenez Brenda,Karen Gaido

jueves, 15 de mayo de 2014

¿Qué es la literatura?

"Literatura: Ocupación de los ociosos", Gustave Flaubert en Diccionario de lugares comunes

Así como el material color no alcanza para diferenciar una obra pictórica de una mancha o de un afiche publicitario, y así como el material sonido no basta para diferenciar una pieza musical artística de una alarma; la consideración de la palabra como material que constituye la literatura no permite distinguir una novela de
una anécdota cotidiana o una poesía de una adivinanza.

La cuestión de definir la literatura es compleja: no alcanza con definir el material con la cual se la construye.

¿Qué es lo que hace que un texto o discurso se incorpore al universo literario?

El origen semántico de la palabra literatura proviene del latin LITTERAE, que significa: letra o escrito. Por ella podemos describir que es el conjunto de escritos de una época, región, o movimiento, que los diferencia e independiza de otras corrientes.

Existe bastante acuerdo en reconocer dos aspectos como constituyentes de lo específico de la literatural: el carácter ficcional y la función estética.

La literatura es ficción
Los géneros literarios, entonces, son ficciones. En una obra literaria se ofrece un mundo imaginario al lector y éste lo recibe como tal. La liteartura es invención aunque incorpore hechos o personajes reales. Esta caracterísitca la absuelve del criterio de verdad/falsedad. En los textos realistas, el autor busca construir ambientes creíbles, que imiten la vida real, está creando la verosimilitud. Aquí tenemos la ficción.
En esa recreación de materiales y experiencias de la vida, el lenguaje se aleja de su objetivo referencial para volcarse a la creación de mundos, para construir discursivamente un universo que pueda ser vivido y revivido por el lector. Aún en las novelas históricas donde los personajes y las historias que se narran son reales, si es una novela, es ficción. Por lo tanto, no puede ser considerado ni verdadero ni falso.

La literatura es bella
Julio Florencio Cortázar Descotte 


En la literatura se reconoce una función de la lengua que no remite a nada que esté afuera del discurso: Ni al referente, ni al emisor, ni al receptor. Es la denominada función estética, que se advierte en el modo en que se aprovechan (exploran y explotan) todas las posibilidades que ofrece la lengua. Cuando Cortázar nos dice que “diálogo anhelante corría por las páginas como un arroyo de serpientes”, el acto trivial y cotidiano de ostranenie (extrañamiento) de la que habló Schlovski, representante -junto a Eichenbaum, Jakobson, Sklovski, Tomachevski y Tinianov entre otros- de la Escuela de Praga, grupo de teóricos que se ocupó del aspecto formal (especialmente, en la poesía) y abrieron el camino hacia la teoría de la literatura como disciplina autónoma.

Ahora que ya conocemos la función estética y el carácter ficcional de la literatura, ¿podemos contestar qué hace que un discurso o texto sea considerado literario?

El canon literario
La mayoría de los textos literarios fueron concebidos y gestados como literatura, pero no todos. Aquí es donde comienza el juego del canon literario, una consagración que la obra recibe de parte de sus lectores o de ciertas instituciones y que aún hoy genera gran discusión. Por ejemplo, el poema conocido como La Argentina (Lisboa, 1602) de Martín del Barco Centenera fue escrito como ‘historia’ veraz aunque hoy integre el canon de la literatura argentina. Las crónicas de Indias, que se pueden leer como literatura aunque su componente histórico y etnográfico sea ineludible, fueron fuente de inspiración para obras literarias como el cuento “El hambre” de Mujica Láinez y la novela El entenado de Juan José Saer.  La intertextualidad nos muestra el diálogo diacrónico entre textos y nos permite comprender que no hay fronteras definidas entre la literatura y otros ámbitos del conocimiento humano.

FUENTES:
-Lengua y literatura 3. Ed. Aique
-Wikipedia
-Blog de Lengua y Literatura by Marina Menéndez